Ahora bien, no se deduce en ninguna de las partes del libelo, específicamente cuál sería el vicio aludido por el consentimiento (si fue arrancado por error de hecho, por error de derecho o por dolo) y tampoco, en qué consistirían las maquinaciones que solo "enuncia".
Principalmente pide la nulidad de la venta que nos ocupa porque en su criterio el documento correspondiente "...resulta evidentemente amañado e irrito...", motivado a "...que el precio pagado por él (sic) inmueble es bastante irrisorio..." (folio 3). En ese caso, no explica cuál sería el precio común en el mercado para ese tipo de ventas para el tiempo en que se ejecutó.
Según se desprende de lo dicho, existió un contrato de comodato entre ANTONIO PEÑA APARICIO como comodante e MANUELO HILARIO RODRÍGUEZ, que tuvo por objeto el inmueble señalado; el cual tuvo un juicio y posterior ejecución por mandato judicial. Contrastando lo expuesto por este demandante, el tribunal observa que aquella demanda que por cumplimiento de c.....